Ciudad de México ,a 28 de Junio de 2017
Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, Sesión extraordinaria, punto 6, por el que se Otorga el Premio Especial por Méritos Extraordinarios correspondiente al ejercicio 2016
Permítanme,
colegas, intervenir en este punto.
Ante
el significativo incremento de las cargas de trabajo del personal de carrera y
de la rama administrativa del Instituto Nacional Electoral, mismo que fue
propiciado por la creación del Sistema Nacional de Elecciones, el Premio por
Méritos Extraordinarios es doblemente importante.
Este
premio es una forma de reconocer públicamente, como ya mencionaba el Consejero
Nacif, las tareas que, más allá de los calendarios electorales y los proyectos
presupuestados institucionalmente, nuestros compañeros del Servicio Profesional
Electoral llevan a cabo para incidir en el desarrollo de una democracia más
participativa e incluyente.
Para
darle credibilidad a nuestras elecciones, fue necesario conformar, a principio
de los años 90, un cuerpo de profesionales capacitados y comprometidos con la
vida democrática que fueran una garantía de imparcialidad en la organización de
las elecciones en México.
En
el caso de Marina Garmendia, las contribuciones extraordinarias por las que
está siendo premiada, están vinculadas, como ya mencionaba también el Consejero
Nacif, a su compromiso con la construcción de un México paritario y libre de
violencia hacia las mujeres.
Permítanme
decirles que la licenciada Garmendia fue propuesta por sus compañeros de la
Junta Local de Baja California Sur, por considerar que su incansable compromiso
con la paridad de género, con la promoción y el fortalecimiento de la
capacitación y la participación político-electoral de las mujeres; así como por
las acciones para prevenir y combatir la violencia política contra ellas,
fueron los factores que en opinión unánime del jurado sustentan que se le
otorgue el Premio por Méritos Extraordinarios.
Aunque
sé que la Licenciada Marina Garmendia Gómez es conocida de todas y todos
quienes tenemos el privilegio de integrar esta autoridad electoral, permítanme
recordar de su trayectoria, únicamente dos datos.
El
primero, que ingresó al Servicio Profesional Electoral en 1999, por lo que en
los 18 años que tiene de pertenecer al mismo, se ha convertido, lo digo con
afecto, con respeto pero con convicción, en un activo de nuestra institución y,
en consecuencia, de la organización democrática de las elecciones en México.