Ciudad de México ,a 28 de Junio de 2017
Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello, en el punto 20 de la Sesión extraordinaria, relativo a los Lineamientos que regulan los criterios respecto de la aparición de dirigentes y voceros partidistas en tiempos de Radio y Televisión
Señoras
y señores consejeros y representantes permítanme hacer uso de la palabra.
Garantizar
la equidad de las contiendas es una de las mayores responsabilidades de las
autoridades electorales en un sistema democrático.
Y
lo es más cuando el sistema político se torna cada vez más competitivo como lo
es el actualmente existente en el país.
La
lógica de la equidad que desde hace 20 años subyace a nuestro sistema electoral
supone la existencia de condiciones de igualdad de entrada para todos los
contendientes de una elección, es decir, implica la existencia de un piso
parejo para buscar obtener una candidatura y, luego, el respaldo de los
electores en las urnas.
Ese
es el sentido del Proyecto de Lineamientos que nos ocupa en este punto.
Se
trata, como todas y todos ustedes saben, de un Proyecto de Acuerdo con el que
el Instituto Nacional Electoral está acatando dos resoluciones del Tribunal
Electoral del Poder Judicial de la Federación que tienen por objeto que el INE
intervenga, para prevenir, investigar y en su caso corregir, el uso indebido de
las pautas en radio y televisión por parte de los dirigentes y voceros de los
partidos políticos para evitar eventuales ventajas indebidas de cara a una
elección.
En
ese sentido, el proyecto plantea como eje, el que, quien encontrándose en esa
condición, aspira a un cargo de elección popular, desde el momento de inicio de
los procesos electorales y antes del arranque de las precampañas respectivas,
debe abstenerse de aparecer en las pautas que corresponden a su partido
político.
Hago
énfasis en el hecho de que ese periodo que media entre el comienzo formal del
proceso electoral y el inicio del periodo legal para que se lleven a cabo las
contiendas internas, es particularmente delicado porque representa el espacio
de tiempo que antecede la contienda propiamente dicha entre aspirantes a una
candidatura.
Para
nadie es una sorpresa que el inicio formal del proceso electoral supone que la
vida política de la sociedad orbita, desde ese momento y hasta la conclusión
del mismo, en torno a las elecciones y, por lo tanto, a partir de entonces las
prevenciones legales y políticas adquieren una relevancia específica.